Hacer una película es comprometerse. Pogue es una tierra de cantores: niños, jóvenes y mujeres viven su cotidianidad en medio de romances, vallenatos, arrullos y rondas, alabaos, chigualos y gualíes. Sus cantos han sido su principal herramienta para resistir a la violencia y reclamar una vida digna y en paz. Cuando terminamos Cantos que Inundan el Río, preguntamos a las cantadoras ¿Para qué quisieran usar la película? ellas coincidieron en la necesidad de construir una casa cultural en su pueblo.
Con la campaña Cantos al Río queremos que los públicos de nuestra película sean públicos activos y solidarios: que puedan apoyar la causa de paz y vida digna a través de lo que ellas mismas esperan de la gente que nos acompañe en las salas, en las redes o en esta página web.